MISS CAFFEINA – «Oh Lonh Johnson»
Warner Music
No cabe duda que MISS CAFFEINA es una de las bandas más seguidas y aplaudidas de los últimos años y no es para menos. No solo por haberse manejado muy bien en el terreno indie en sus primeros trabajos, sino porque consiguieron, cambiando de género en «Detroit» lograr convencer y superarse a golpe de sinte, forjando una personalidad bajo un cambio brusco pero acertado.
Su nuevo sonido dio el golpe en la mesa para saltar al estrellato nacional definitivo. Han arrastrado miles de fans en una gira de dos años con un gran álbum con el que disfrutar en festivales, de letras con profundidad y la personalidad vocal y letrística de Alberto al frente. Un conjunto muy sólido en directo y bien cuajado en estudio.
Todo eso se deja notar en su nueva y esperada obra «Oh Long Johnson» que, como era de esperar, continúa esa senda que mostraron en «Detroit» pero que aquí refuerzan en un sonido pop ochentero que, de verdad, suena muy pero que muy bien. Un conjunto de temas exquisitos, con un poco de todo y ante todo bailables.
Sonidos discotequeros con tintes funk como «Planta de interior» de mucho sinte y luminosidad en casi todas sus canciones. Es disfrutable y profundo cuando quieren, donde la carga emotiva sale a relucir en cortes como su ya hit «Reina» o la lenta y final de «Ausentes presentes».
Un disco vivo como deja ver «Oh Long Johnson» un inicio de los que invitan a salir a la pista, y que a su vez, dibuja un disco crítico en lo que se refiere a «la atención robada por parte de las pantallas». Pop y electrónica muy viva que funciona a la perfección en bellos temas de indudable gancho «Fiesta nacional» a la intensidad controlada que respira un tema como el bullying de «Calambre» de sus mejores letras, pasándonos al sonido sexy de «Prende».
Un álbum «Oh Long Johnson» donde no hay hueco que rellenar, todo brilla cual bola disco en lo alto para dar brillantez a letras y composiciones que se disfrutan y entran en bucle, porque repetiremos una y otra vez. Un conjunto notable, de madurez en todos los sentidos, sonido revival y empaque brillante con el que dar luz a días oscuros.
Miguel Rivera
