¿Qué coño estamos haciendo aquí?
¿Se han vuelto más incómodos los festivales o es que nos hemos hecho mayores? Si nos paramos a pensar, seguramente haya un poco de ambas para responder, más si cabe que desde 2019 no nos encontrábamos en la tesitura de poder volver a disfrutar de ellos, y que también la vuelta a los mismos, tres años después, se hace tras un camino pandémico en el que nos llegamos a olvidar de los apretujones y del gentío, dos años largos marcados por las distancias, cero aglomeraciones e individu...