Teatro CaixaBank Príncipe Pío, Madrid
La música es un elemento esencial tanto en cine como en teatro, pero más si cabe cuando la obra que vas a ver como en el caso de The Primitals es la baza principal, porque esta producción de Primital Brothers e Yllana nos ofrece una obra musical a capela y lo hacen con un desparpajo, humor y voces que te inundan por dentro como si nos encontráramos con toda una banda u orquesta sobre un escenario en el que solo cuatro artistazos dan el do de pecho.
La historia es sencilla, cuatro aborígenes, notablemente maquillados para la ocasión, saltan al escenario para ir creciéndose mientras caminan por diversos momentos de la historia musical en la que, con el humor característico de producciones en las que se encuentra Yllana, tenemos humor gestual, incitando al público a participar en la misma con palmas y momentos histriónicos muy bien ejecutados. Pero lo realmente impactante del espectáculo es la interpretación vocal a capela de Primital Brothers. La comedia es el punto de partida para que vayamos buceando a través de míticas canciones que tocan diversas generaciones, por lo que será muy emocionante vivir momentos irrisorios de la mano de las impecables voces de su elenco.
Pasamos por reconocibles pasajes cinematográficos con risas aseguradas, Indiana Jones o Star Wars nos regalan uno de los mejores sketches del espectáculo, ese que arranca de manera más “primitiva” y que va ganando enteros a medida que avanza, tanto en su humor gestual como especialmente musical, dejando patente la calidad de sus cuatro artistas en lo vocal, en este caso un Teatro Caixabank Príncipe Pío a rebosar.
Va in crescendo la obra, disfrutamos con un notable “Sweet dreams” de Eurythmics mientras asistimos a las luchas internas de los cuatro aborígenes, nos emocionamos con un “Creep” de Radiohead, donde uno de sus intérpretes se “enamora” de una de las chicas de la primera fila, y manejamos una recta final apoteósica que nos lleva por el Bohemian Rhapsody de Queen ante los aplausos enfervorecidos del público y una demostración talentosa de ópera con el “Nessun dorma” de Puccini para dejarte con sensación de risa, asombro y, ante todo, emoción.
Una demostración impecable de voces, buen humor y un repertorio generacional y diverso con el que pasamos por todos los estados dejando un único final posible, el que nos hace levantarnos de la butaca y aplaudir con fervor.
En su web podéis conocer los espectáculos que tiene en estos momentos la compañía
