KRONNEN – «La trayectoria del impacto»
Discmedi
Puntuación: 8/10
Desde los primeros compases de «La trayectoria del impacto» KRONNEN deja claro ese salto de calidad que buscaban, tras cambios de formación y un tiempo de dedicación y descanso para preparar con calma su disco más ambicioso.
Es esta una de esas bandas que deben convertirse en relevo generacional para otras dentro de un estilo metal alternativo y profusión melódica y melancólica que trabajan con detalle y precisión, esa que brilla a todas luces bajo una producción impecable y una voz intensa que domina esas melodías y cambios que suponen sus temas.
La trayectoria del impacto es un álbum que descubrir poco a poco, que guarda mucha energía con ese tinte oscuro, que en cortes como «Inercia» tiene cierta esencia Sober pero que va más allá en todo momento, busca la fuerza y el romanticismo de unas estructuras peculiares, de acordes majestuosos y energía en estribillos explosivos.
Es un disco de matices, de energía alternativa y esencia estructural americana «La barrera» gran single de presentación como en la pesadez instrumental de base de «Los visitantes» y la magia directa de «Inercia» que busca un compromiso intenso en su gran estribillo, bajo algunos cambios vocales de Rafa Neural, más poderoso a veces y «romántico» en otras, en un legado sonoro fabuloso.
Acordes bellos en «Magia o química» donde Rafa se torna mucho más delicado bajo una melodía más que bonita mientras que «Metas» busca el hardcore más duro, cambio radical y sonoridad metálica americana más machacona de inicio en «Sumisión interrumpida» y más fuerza vocal. Es ahí donde KRONNEN sorprende buscando y eligiendo inteligentemente la variedad sin salirse de su terreno para ofrecer un disco variado y rico siempre bajo esa intensidad y tono melancólico que rezuman en todo momento. Modernos en «Hacia el este del edén» más a lo Sevendust en su forma dan cuenta de su gran proyección en un resultado impecable.
«La trayectoria del impacto» es esa que seguimos para impactar con doce temas de indudable dedicación.
Miguel Rivera