UN CASO DE ÉXITO
Siguen sumando fechas a una gira interminable pero es que LA MARAVILLOSA ORQUESTA DEL ALCOHOL (LA MODA) tiene que aprovechar un tirón mediático y de seguidores indudable. Curiosamente, tras la gira la banda plantea su desaparición de los escenarios. Curiosidades, confesiones y más cosas en una entrevista en camerinos del Fardelej.
Otro concierto más, un festival que añadir a vuestra carrera, hacia dónde va LA MODA más de moda que nunca, por cierto.
David: No sabemos la verdad. Sumamos más conciertos de presentación de la gira y tenemos el verano a tope y fiestas, acabamos de empezar como quien dice. Sabemos lo que haremos estos 4 meses que será tocar hasta octubre y disfrutar y luego pretendemos no sé si decir desaparecer pero sí dar un paso atrás y estar una temporada alejados al menos de la actividad de cara al público. No sabemos ni queremos desvelar nada de lo que vendrá después, si habrá nuevo disco o no, si nos separaremos o qué sucederá. Preferimos dejarlo ahí porque llevamos 5 años sin parar, y aunque mucho público no nos conoce no queremos convertirnos en unos pesados, por el público y por nosotros para tomar conciencia de lo que hemos hecho.
Nunca hemos tenido prisa ni forzar la maquinaria. Veremos hacia dónde vamos.
Llama la atención que con tan poco tiempo ya queráis un descanso.
No es tomarnos un descanso, porque eso es pasar del tema. No es que necesitemos descansar estamos mejor que nunca. Nunca hemos visto esto como la gallina de los huevos de oro. Preferimos nuestros tiempos, por eso no estamos con discográficas, queremos dirigir nuestros pasos y el cuerpo nos pide desaparecer del primer plano, salir de los escenarios una temporada.
¿Pensasteis llegaríais hasta aquí?
Partiendo de la base que hay bandas mucho más grande que nosotros, siempre se piensa algo pero ha ido todo fluyendo y trabajando. Ha habido ingenuidad y espontaneidad que no queremos perder.
Una Riviera llena en Madrid, viniendo de Burgos ¿cómo fue ese día?
La leche, muy especial, pero cada concierto es importante y tiene su encanto. Nos hemos hecho en la calle, en bares, y lo hacemos con las mismas ganas todo. Pero fue un día muy especial agotar entradas en Madrid y en una sala como La Riviera seis semanas antes.
¿Qué tipo de público veis en vuestros conciertos?
Pues vemos mucho público diverso, tanto de edad y gustos. En festis quizás más joven, otros días en salas más viejos rockeros… nos llega gente de todo tipo o padres que van con el hijo, unos heavies que les entramos, gente muy curiosa o en festivales con grupos que nos han venido de vertientes muy duras que les gustamos. Eso nos encanta, porque a nosotros nos gusta de todo.
En España ¿es difícil poder vivir de la música?
Sí, es complicado porque cuanta más alejada sea tu propuesta de lo que se radia en emisoras o televisión. Hay que apoyar la escena e ir poco a poco. En España al final Kiko Rivera llena sitios y Belén Esteban vende muchos libros, hay que ver también la realidad y ser consciente de dónde estamos e intentar cambiar las cosas.
¿En qué términos se encuentra el rock en este país viendo lo que tú has dicho?
Es una buena pregunta y difícil de contestar. Es mejor seguir currando y escribiendo canciones que te llenen independientemente de quién te vaya escuchar porque así saldrá algo bueno. Al final es mejor predicar con lo cercano y controlar lo que tú haces y manteniendo un equilibrio. Hay que tener esperanza.
¿Las redes sociales son importantes?
Es un medio de estar en contacto con el público día a día y saber qué piensan de ti pero sin darle más importancia. Te puede afectar bien y mal pero somos más de abrazar a la gente, bajar del escenario y saber de dónde vienen a verte y estar cerca en presencia.
¿Seguís con los pies en el suelo?
Sí, siempre intentamos sacar 20 minutos después de tocar para hablar con la gente, porque también hemos querido eso cuando estábamos abajo hacia otros grupos que te gustan.
Una buena y una mala crítica, ¿afecta?
A mi sí, porque algo en lo que has trabajado con empeño y esfuerzo siempre sabe mal. Pero suelen ser muchos más buenos comentarios que los negativos, y estos últimos te preparan para poder afrontar más críticas. Ni todo es tan bueno ni todo es tan malo. No puedes gustarle a todo el mundo pero la respuesta ha sido muy buena siempre.
Que haya grupos con mucho éxito que se reinventan o separan como Bongo Botrako, o cambios como Muchachito, ¿puede ser que sea por el cansancio?
Sin duda, hay muchos motivos, porque esto agota pero sin duda esto no es un trabajo y hay que dar gracias. Hay una exigencia que igual no se ve ahí atrás, pero tienes a miles de personales delante y si te importa eso tienes una presión y exigencia personal por dar el máximo. Todo es la leche pero hay desgaste y los grupos con carreras longevas se nota mucho y hay que tener cuidado porque todo eso no se pierda.
¿Algo que decir para finalizar?
Ha sido la leche tocar aquí en Fardelej, un festival diferente y aprovechamos para dar las gracias a la organización, al público y a vosotros por estos minutos.
Miguel Rivera
