SLASH Feat MYLES KENNEDY AND THE CONSPIRATORS – «Living the dream»
Roadrunner, Warner Music
Habiendo visto dos veces en menos de un año a GUNS N’ ROSES y teniendo en cuenta la carrera discográfica de SLASH en estos momentos, diría que me quedo con lo segundo, sin despreciar a la veterana formación.
El caso es que, aunque siendo uno de los tours más millonarios de la historia y todo lo nostálgico que conlleva ver a Axl sobre el escenario junto al peludo guitarrista, SLASH ha conseguido rejuvenecer sin dejar de lado el sonido de los noventa gracias a su alianza con Myles Kennedy, una de los mayores talentos vocales de la última década.
No es casualidad que ante el talento de uno y otro, sus discos alaben un gran trabajo que consolidan sobre el escenario. Su próxima visita el año que viene en recintos grandes atestigua su nombre actual.
Si los noventa fueron de los Guns, a día de hoy ver a Slash junto a Myles, quien además factura con su voz unas versiones de aúpa, la cosa está que arde. Y centrándonos en discos de estudio, donde no podemos comparar dado que lo último de Axl digamos que en solitario data de hace más de diez años, lo cierto es que el guitarrista ha generado dos últimos trabajos notables.
Aquí tenemos el nuevo «Living the dream» donde vuelve a dar una lección de clase, distintiva en lo compositivo porque se nota a la legua quien toca y, por supuesto, quien canta. Junto a Myles y Conspirators tenemos hard rock del bueno, tintes muy rockeros y esa vena noventera y macarra.
No hay nada más que ver el acelerado «The call of the wild» una especie de road music porque huele a gasolina tocada con brío y guitarreo macarrónico. «Serve your right» tiene guiños entre el hard y el blues mientras que «My antidote» tiene un deje muy Guns, pura energía y estribillo contagioso donde, señores, Myles es pura magia vocal, fuerza y personalidad, quien sabe si tan reconocido dentro de veinte años.
Velocidad «Mind your manners» y medios intensos «Lost inside the girl» donde también podríamos notar notas de los Alter Bridge iniciales. «Red between the lines» con esas marcadas líneas del blues más rockero, o baladas como «The one you loved is gone» donde no descubrimos nada nuevo ante el talento y capacidad emocional que desprende al frente Kennedy. Y para cerrar qué mejor que con grandes sensaciones siempre bajo acordes puramente Slash «Boulevard of broken hearts».
El guitarrista norteamericano no se siente menor junto a Kennedy, más bien sigue agrandando una carrera en solitario que ha consolidado y que, en disco y en directo, no mira de reojo a nadie y lo disputa de tú a tú.
Miguel Rivera
