PASO AL FRENTE
Un paso al frente y nuevas ilusiones musicales. Eso es lo que podemos encontrar tras CIUDAD JARA la nueva banda de Pablo Sánchez, cantante de LA RAÍZ que como algunos de sus antiguos compañeros, comienza nuevo proyecto. Una variedad musical y el talento compositivo que ya le conocemos dan como resultado un magnífico primer disco «Donde nace el infarto». No pudimos dejar pasar la oportunidad de hablar con él para conocer esta nueva y gran aventura musical.
Habría que comenzar hablando de la acogida con este primer disco en poco más de mes desde su salida, ¿qué balance haces?
Un balance muy ilusionante. Es un trabajo nuevo, un proyecto nuevo, es todo nuevo y salir a la escena defendiendo todo un concepto diferente era muy arriesgado. La gente, en general, ha entendido el cambio.
Al ser la voz, muchos recordarán a La Raíz pero creo que Ciudad Jara ahonda más en otros estilos además del rock.
Sí, era una de las premisas del nuevo proyecto, no cerrar el abanico de posibilidades por muy lejanas que pudieran parecer. Me puedo atrever a tocar muchos estilos y a interpretar de muchas formas. Tiene que ver con la liberación artística y creativa.
¿Crees que estas canciones tendrían cabida o sentido en La Raíz?
No, porque son personales. En La Raíz podía crear como a mí me gustaba, pero lo hacía siempre pensando en el colectivo y en darle un papel determinado a 11 personas diferentes, era de una exigencia fuera de lo natural. Si hubiera hecho estas canciones para La Raíz serían muy diferentes, perderían la esencia que tienen ahora.
¿Te has sentido libre a la hora de jugar con los temas?
Muy libre. Es verdad que he sentido mucho nervio y mucha presión, pero el momento de componer es mi momento zen, y hacerlo con 1 año y medio de margen ha sido muy bonito.
Imagino que esta banda nace de la necesidad personal de seguir creando, ¿cómo se forja en tu cabeza?
No se forja, surge de una manera natural, casi alarmante. Esta necesidad de seguir creando pero de una manera distinta hizo mella en mí a nivel emocional, porque era duro desligarse de esa formación de amigos que tenía en La Raíz, y se tradujo en ansiedades y malestar. Surge de manera natural y explota con mi comunicado a la banda de que necesito parar.
Dos presentaciones en Madrid con sold out nada más nacer, ¿venir de La Raíz ayuda?
Seguro que ha ayudado. Pero hacer las cosas con pausa y con amor también ayuda.
No empiezas de cero pero ¿cómo es volver a “empezar” con un nuevo grupo?
Es muy bonito. No tienes la energía que tienes cuando eres una persona joven o adolescente pero la ilusión juega dentro de ti de otras maneras, desde el sosiego. Es una ilusión más madura.
En lo que respecta al directo de Ciudad Jara, ¿qué es lo que va a encontrar la gente?
Eso queda para que lo decida el espectador. Intentaremos que les llegue, de algún modo. Diferente a La raíz, si es lo que queréis saber.
Hace unos meses entrevistamos a Valira, ¿qué opinión te merece?
De La Raíz han surgido varias bandas. Todos los músicos que han salido de ahí son muy talentosos. Es muy valiente embarcarse en un proyecto propio e intentar llegar a todo el mundo con tus propias canciones. Todo mi respeto.
¿Cómo es la escena musical en cuanto a locales y bandas en tu ciudad?
El otro día fui a ver un evento de bandas locales y me llevé una grata sorpresa. Creía que el rock había desaparecido en pro de las propuestas unipersonales y electrónicas, pero aún nos queda mecha.
¿Es ahora el rock menos reivindicativo que hace una década?
No lo creo. El rock y el arte en general, para mí, es una manera de expresar tus dolores . El arte es una expresión de protesta en sí, en continua evolución , en un desafío a las normas continuo, desde el punto de vista de su creador. Quizá hace unos años era más valiente o más alocado en su expresión, pero no deja de ser reivindicativo.
¿Crees que el Coronavirus afectará de algún modo al circuito musical de salas y festivales?
Seguro. Si no es con aplazamientos, será con la afluencia del público. Es muy delicado.
¿Cómo fue el momento de decir hasta aquí con La Raíz?
Fue difícil, como te he contado antes. Pero es un capítulo pasado y uno de los más bonitos de mi vida.