René Merino
Lunwerg
El humor siempre es una herramienta eficaz para todos los males, y en estos tiempos que nos ha tocado vivir, más aun, en los que una sonrisa o una carcajada son más necesarios que nunca. El viñetista René Merino vuelve con un nuevo libro “Un día ocurrió” que ofrece viñetas que leer en segundos gracias a sus microcuentos, en los que vuelve a demostrar sus dotes para lo absurdo pero también para lo particular de su humor, tocando temas intimistas, alocados o sociales.
La reflexión con una sonrisa vuelve a darse frente a nosotros en un trabajo de 129 microcuentos con los que pasar unos minutos divertidos, porque se leen rápido pero cuyos textos en ocasiones dejan un poso más profundo y llamativo de lo que se podría esperar.
René fue uno de nuestros invitados de Rostros gracias a su primer legado “Está mal, pero se puede empeorar” que llegaba el año pasado en pandemia y, lejos de achantarse ante la situación ha sacado más trabajo adelante, necesario para el lector con el que disfrutar un buen rato profundizando en sus ilustraciones y los textos que acompañan.
René tiene un estilo visual de trazo fino y un humor tan particular como diferente, ahí gana puntos gracias a su forma única de contar historias, riéndose del mundo o sacando fuera ciertos miedos o inquietudes. Una forma de expresión necesaria en la que poder alejarnos del mundanal ruido, ahora menor, para sacarnos una sonrisa tan buscada como vital. Y lo consigue, ahí su valía y éxito.
