BLACKFIELD – «IV»
Kscope
Puntuación: 8/10
Con el tiempo el proyecto que comenzara años atrás el israelí AVin Geffen y el genial Steven Wilson ha ido tomando vida propia y ganando fama gracias a su elegancia, estilo y sentimiento que desprenden con cada trabajo.
AVin regresa con su cuarta obra y lejos de quedarse estancado vuelve a sacar brillo a un conjunto de canciones emocionales, de gusto melódico infinito, de voz exquisita, de estribillos y contagio musical que adornan con acordes, arreglos e instrumentación perfecta. Wilson añade estilo en guitarras y voces en algunos temas y todo suena perfecto junto a colaboraciones deliciosas e inteligentes. Lo hacen en torno a once temas que de veras, pasan tan rápido que no nos damos cuenta y necesitamos de muchas más escuchas para degustar todo lo que conlleva cada canción.
Te sumergen en un viaje emocionante de estilo Porcupine «Pills», de rock dulce «Springtime» con ese juego vocal que sabe a caramelo pretendido por esa melodía mágica y nos introducen en un bonito sueño musical «X-Ray» con la magia desbordante de uno de los vocalistas con más sentimiento Vincent Cavanagh de Anathema.
Sentimiento y emocion de calma estudiada «Sense of insanity» que busca el rock tranquilizador con estribillo grandilocuente y emocionante, mientras que nos entusiasman junto a Brett Anderson de Suede en un tema muy suyo.
Otro corte ensoñador y nunca mejor dicho por su estructura tranquilizadora «The Only foll is me» con Jonathan Donahue del grupo Mercury Rev o «Jupiter» donde el piano toma más protagonismo si cabe y esos acordes mágicos contrastan con algo más de fuerza en forma de «Kissed by the devil» de estilo muy pero que muy inglés.
A veces, la música puede tocarse el corazón y llenarte de emoción y magia y en esas BLACKFIELD es jugar sobre seguro. Una vez más, y van cuatro, vuelven a entusiasmar con su rock dulce y majestuoso.
Miguel Rivera