Cuando no tenía ni 20 años, la jovencísima y prometedora Alice Wonder ya sorprendía al mundo en acústicos y presentaciones en Madrid. Recuerdo de verla por primera vez en las sesiones de Casa Corona, donde pude entrevistarla para comenzar a conocer su andadura. Poco después, llegaría “Firekid”, el sorprendente primer trabajo de la artista impecable.
Un éxito que ha confirmado paso a paso y concierto a concierto consiguiendo, gracias a su talento, reunir a un ecléctico público que ha sabido reconocer la calidad de su música. Ahora, con 22 año y una pandemia mediante, la artista ha dado un paso delante de manera sorprendente, porque además de ofrecer su primera obra en castellano, lo ha hecho sin tener de primeras la intención de forjar un álbum completo.
“Que se joda todo lo demás” surgía con tres temas iniciales, sin mayores pretensiones como me contaba hace tan solo unos días en una entrevista en Madrid. Ahora, con el disco en la calle, lo que tenemos es un álbum que habla de amor y desamor como nunca, pero también de superación en un ejercicio musical y vocal capaz de emocionarnos como pocos artistas pueden hacerlo.
Su música y sus letras nos calan hondo y llegan ahora sí, de manera impecable gracias al castellano, con el que conseguirá sumar corazones rotos y cosidos a su música.
“Por si apareces” fue uno de los primeros temas que ya pudimos escuchar años atrás, capaz de remover sentimientos y antiguas relaciones, en ese tono acústico en donde Alice te inunda a la voz en su historia. “No te vayas” es el emotivo corte inicial, el miedo a perder a una persona dirige un tema lento e intenso, una forma de abrirnos en canal para lo que viene, un disco crudo y emocionante como pocos.
“Sueño raro” se basa en una producción y piano impecables, un intensísimo juego musical que la engrandece, uno de los mejores cortes del disco. “Que se joda todo lo demás” tiene ese sentimiento pop in crescendo que en su estribillo brilla, como en “Por si apareces”, hablado de amores no correspondidos y superación, capaz de hacerte llorar y respirar hondo a su vez.
“O” es un corte semi acústico que nos pone en la situación complicada de la decisión que hay que tomar en ocasiones antes de dejarlo con tu pareja, removiendo conciencias y corazones con un desparpajo y sentimiento crudo y bello a su vez. Llegamos a su “Corazón mármol”, en el deseo de paz necesario tras toda esta historia de amores y sentimientos al desnudo. Ritmo tranquilo y, de alguna manera, inquietante que despega efectista y romántica.
Y para descolocarnos, dando ese punto de luz “¿Quién soy?” un ritmo electrónico que suma y mucho tras tanta intensidad para subirnos el ánimo y saber “Decir adiós” siendo libre, mágica, única.
Alice Wonder es el talento hecho música, una voz tan reconocible como increíble son sus composiciones, una fusión que en castellano emociona como nunca antes, elevándose a los cielos, desnudando alma y corazón y hablando del amor y el desamor con una brillantez y madurez personal y compositiva de la que enamorarnos, en un grito musical en la que decirle a esa persona “tú me completas”.