Veía nuevamente esta semana en La 2 de televisión el clásico cinematográfico Saturday Night Fever, aquella película que vanaglorió a un fantástico, guaperas y hortera John Travolta, quien después se convertiría en mayor icono con una muy superior Grease.
La música disco relucía como la bola de discoteca en Fiebre del Sábado Noche en un film mítico que más que como película, resulta destacable simplemente en cuanto a su banda sonora, esa que los Bee Gees convirtieron en el soundtrack más vendido hasta que llegó en los 90 Whitney Houston con El Guardaespaldas para arrebatarle dicho título.
El caso es que los hermanos Barry, Maurin y Gibb crearon un repertorio de canciones que, lejos de modas y estilos, siguen a día de hoy cosechando aplausos y devoción entre diversas generaciones.
El reciente documental (disponible en Prime Video) sobre los Bee Gees, ha servido para que Foo Fighters muestren su vena más divertida y setentera, amén del arranque fan de su líder, Dave Grohl, quien tras ver el docu ha querido con motivo del Record Store Day ofrecer su particular homenaje en DEE GEES «Hail satin»
Hail Satin se grabó en los Studio 606 de los propios Foo Fighters y su tracklist ofrece 4 versiones de los Bee Gees, sus tremendos «You should be dancing» que fue el primer single de anticipo, la fiebre disco de «Night fever», «Tragedy», Shadow dancing» (hit de Andy Gibb) y su mágica «More than a woman». Lo hacen más bien como fiel reflejo de las originales, ya que aunque con algo de distorsión, la banda ha querido sonar a Bee Gees sin arriesgar ni potenciar su sonido, simplemente unos covers que funcionan por la simple magia de las originales, pero sin mayores sorpresas.
La segunda parte son grabaciones en directo de su disco «Medicine at Midnight» que realmente no sé muy bien cómo encajan en un concepto de disco dividido en dos partes que pueden descolocar.
¿Resultado? Una curiosa forma de escuchar algunos temas míticos de Bee Gees diría que reinterpretados por la banda de rock, pero que vienen a ser simples covers que poco o nada se alejan de las originales, junto a versiones en directo de canciones de su último disco, que sirve más de curiosidad en resultado que de gran disco.
