DEMONIOS DEL ROCK
La banda valenciana LOS ZIGARROS están de estreno. «¿Qué demonios hago yo aquí?» es el espectacular directo en DVD y disco que pudieron grabar el pasado mes de enero en el Teatro Circo Price. La banda ofrecía una lección de rock and roll puro que ahora comprobamos desde casa. Un directo con doble valor, por el concierto en sí, que además, contó con grandes colaboraciones, pero también porque sin saberlo, dieron su último gran concierto antes de que nos sumiera en el caos la pandemia. De todo ello hablamos con ellos.
Ricardo Rubio
¿Cómo se afronta el 2021 con esta incertidumbre a pesar de las vacunas?
Álvaro: Es simple, esto va a continuar para largo, no tengo demasiadas esperanzas en que cambie muy pronto. El otro día veía carteles de festivales y la verdad es que me llamaba la atención.
Este trabajo se grabó en enero en el Inverfest, ¿tiene quizás un doble valor por lo que supone a día de hoy?
Ovidi: Pues sí, te diría que es una suerte viéndolo ahora, porque lo grabamos por los pelos. Es una bomba como lanzamiento para presentarlo, perfecto para estos tiempos.
Álvaro: Si fuera un disco nuevo sería distinto sin poder girar en estos momentos, porque cae un poco en saco roto, pero en este caso recoge un directo de hace casi un año.
Sacar un disco ahora, sin presentarlo, ¿no se queda un poco en el olvido?
Ovidi: Pensaba un poco eso escuchando el nuevo de The Lemon Twigs que lanzaron en agosto, y al final no paro de escucharlo, y como yo habrá más gente en el mundo. Cuando ellos vuelvan a girar, seguro que funciona. Es cierto que yo, con disco nuevo, preferiría no sacarlo en este momento, pero creo que si decides sacarlo, no deja de estar ahí. De todos modos, lo comprobaremos cuando después de meses o un año del lanzamiento de un disco, empieces a presentarlo y comprobar si la gente lo ha oído en casa, si sigue latente, yo creo que todo eso se va a dar. Es una nueva manera de consumirlo.
¿Habéis trabajado en nuevo material?
Ovidi: No, yo personalmente no estaba muy bien para ello, pero hace unos meses hemos empezado a hacer cosas, Álvaro y yo tenemos un estudio, y hemos trabajado en cositas., pero el año que viene tendremos que tocar todo lo que no hemos hecho en este, así que el siguiente disco puede que llegue en 2022.
No será un disco tóxico por los tiempos que corren…
Ovidi: Para nada, aunque es un tema que está ahí, lo quieras o no, nada más salir a la calle lo ves llevando mascarillas, además de ser un tema que ha tocado a toda la gente del planeta, es algo muy fuerte, pero que vamos a esquivar en las nuevas canciones.
Álvaro: Nos pasó justamente eso, que nos daba por pensar en soledad, en ciertos aspectos tristes que vivías, así que hablar de ello no es lo que queríamos, porque ha sido y sigue siendo el tema universal.
¿Es duro mantenerse sin actividad, hay que tirar de ahorros?
Ovidi: Es duro, y sí, tiras de ahorros como dices.
Álvaro: Yo después de muchos años ahorrando he podido capear el temporal, porque me ha pillado con algo de dinero y menos mal, pero por otro lado, también digo que no quiero gastarme todos los ahorros después de años currándomelo. Pero es verdad que tenemos gente cercana, de crew, músicos que no han podido encontrarse con ahorros y que se buscan la vida, ya sea dando clases o si tenían otra profesión, dedicándose a ello ahora.
¿Creéis que las administraciones se han olvidado de la música?
Ovidi: Yo creo que nuestro sector se lo toman un poco a broma. Hay una gestión errónea como comentaba Álvaro, tienes un concierto súper estricto en las medidas para poder llevarse a cabo y te encuentras un centro comercial abarrotado, ahí hay algo muy básico que falla y es obvio que se está gestionando fatal. Está claro que se pueden hacer conciertos y hay que querer encontrar la manera, en horarios, formas, medidas, pero las hay, porque de otro modo, no abras el centro comercial. Obviamente el comercio con Zara o Mango, eso es Dios ahora, es el capital y eso va a abrir, es lo que reina y nosotros no somos comparables, al lado somos basura, y con ello el sector se ningunea, reclamas pero no te hacen ni puto caso. Así que sí, las administraciones claro que se han olvidado de nosotros.
Alvaro: Por supuesto, estamos olvidados pero te hartas un poco de quejarte, estuvimos en la manifestación de Valencia y yo me emocioné, porque es todo muy triste. Tengo amigos cercanos que viven en la auténtica mierda, que con 46 años han vuelto a casa de sus padres, un drama absoluto, en la música pero también en el teatro, en otras artes y ámbitos de la cultura, es muy duro. Si ha pasado esto y es igual para todos nos lo comemos, pero viendo lo del centro comercial te vas enfadado, porque no es justo.
Un concierto en La Riviera el 26 de diciembre, sentados y con las medidas actuales. ¿Cómo sale uno a tocar cuando ves así a a la gente?
Ovidi: Es difícil que la gente y el grupo salga con la misma tensión que de normal, porque partimos de la base de que tienes la boca tapada, y eso es muy fuerte, es terrorífico para el corazón de una persona. Para nosotros, como tenemos tantas ganas de tocar, salimos a romperlo, te pones en el escenario y haces “pum” a tomar por culo, y lo das todo.
Álvaro: El otro día en Canarias salimos y veía a la gente moviéndose desde su sitio, sin levantarse, moviendo sus manos, cantando, y al final, quieras que no, en ese bolo conectamos, quizás cuesta 20 minutos, creo que tanto para ellos como para nosotros, porque además acabas un tema y hay un silencio sepulcral, porque al no estar juntos no hay ese murmullo habitual. Ahora acabas un tema y es como el teatro, un silencio que admiro a quien se dedica a ello, porque ese silencio es demoledor. Hemos ido a ver a El Brujo, que sale el solo y la primera palabra que dice con todo en silencio acojona, y eso lo sientes un poco ahora. Pero son los primeros minutos y luego la gente se suma a esa voz.
¿Qué se encontrará quien vaya a la Riviera?
Ovidi: Pues un concierto de rock and roll con todas la letras, porque tenemos tantas ganas que eso es lo que habrá. Llevamos casi un año, con dos conciertos grandes, el último el del Teatro Circo Price que recoge este lanzamiento, en enero de este año, y ahora en diciembre en la Riviera, hablamos de dos bolos grandes espaciados en un año por las circunstancias
, es muy fuerte.
¿Con qué finalizamos?
Ovidi: Esperamos que se acabe esta mierda rápidamente, y punto.
