EN LA PELEA
En la música siempre hay influencias y como dice MARLON «ya está todo inventado». Es por ello que escuchando su rock pegadizo encontraremos reminiscencias de grupos canallas como Pereza pero, más allá de eso, la joven formación liderada por la voz de Adrián Roma busca su hueco y tira de personalidad fresca, alegre y divertida para buscar su propio público, muy heterogéneo por cierto. Hace unos días nos tomamos una cerveza junto al propio Adrián y el guitarrista Juan Fernández. Pasamos un buen rato y buscamos en el fondo del grupo para hablar, de forma clara y sincera, a veces contundente, de muchas cosas.
Vuestro disco debut se ha ido alargando en el tiempo y sigue sin salir.
Juan: Sí, es un tema que tenemos en la cabeza desde hace mucho. Hay canciones grabadas pero estamos en un punto que van saliendo más cosas cuando nos juntamos y, estando en una discográfica, también hay unos planes y tiempos, pero este año viene con disco casi seguro.
La reacción del público con el EP ¿qué tal ha sido?
Adri: Donde más notamos el buen rollo y feedback ha sido en los conciertos que es cuando la gente demuestra ese feedback. La gente te canta las canciones y la reacción es buena con cada cosa que sale. La gente paga su ticket y eso ya dice mucho del interés por el grupo.
¿Habéis notado más apoyo en esta mini gira?
Adrián: Mucho, aun siendo ciudades nuevas sí que hemos notado ese subidón, ese apoyo, y la gente se mete de lleno en ellos. Hemos vendido casi todos los fanpack, en Madrid todos y eso es que hay fenómeno fan, que tienes ese apoyo y ante todo sentimos sobre el escenario que lo están pasando muy bien.
Al tocar y cerrar en Madrid, ¿se actúa con más nervios?
A: Son más ganas que nervios. Vamos haciendo salas de mayor aforo y ver que vas subiendo peldaños en directo pues es para sentirse satisfecho. La gente responde y más que nervios hay ganas, y ese gusanillo interior. Es algo positivo y muy bonito, algo que se transforma en energía sobre las tablas.
El nuevo disco, ¿recuperará alguna canción del EP?
A: Sí, seguramente 3 o 4 estarán dentro. Lo bueno de sacar primero un EP es que ves qué tipo de canciones funcionan mejor y cuáles menos, así que la mitad sí estarán.
Cómo dice vuestra canción, ¿creéis que hay “cosas que no se pagan con dinero” o qué todo se puede comprar?
J: Se pueden comprar muchas, pero las hay que no se pueden comprar.
A: En ese tema nos referimos mucho a esas cosas que no son materiales. Hay gente que tiene mucha pasta y puede no vivir este tipo de experiencias o incluso no ser feliz por mucho dinero que tenga en el bolsillo. A nosotros nos hacen felices muchas cosas para las que no nos hace falta el dinero.
Qué gente con dinero y fama como Chris Cornell o Chester de Linkin Park llegue hasta el punto de suicidarse…
J: Sí, es un tema muy complicado. Suponemos que todo lo bonito que puede verse desde fuera no lo es tanto, y hay momentos de desesperación total en uno, unido a una época muy marcada por las drogas que son cosas que suman de forma muy triste.
“Cosas que no se pagan con dinero” en su vídeo esconde juerga, deporte, nocturnidad… ¿es quizá un símbolo de Marlon?
A: Lo que hemos hecho es llevar a una parte de la gente a ver y sentir cosas que realmente no se pagan con dinero y que dan felicidad, como salir a patinar con amigos, coger bicis y divertirse… es una noche en la vida real de Marlon.
Sois muy activos en redes, ¿creéis que es una forma de llegar a un público concreto?
A: Sí, porque todo ahora se mueve a través de las redes sociales y especialmente Instagram, por suerte o por desgracia, para mi más por desgracia pero todo gira en torno a eso.
J: Creo que son cosas que marcan mucho a la gente, pero también es verdad que tiene doble filo, porque muchos se guían por cosas que se llevan o no en redes, o gente que lo peta y luego no es lo que parece.
A: Antes los números en redes no era lo importante, sino más bien lo que hicieras o cómo fueras. Ahora todo gira alrededor de si tienes likes o no, de cuántos te siguen o cuantas visualizaciones tiene tu vídeo para entrar en un sitio u otro. Una pena.
La televisión tuvo grandes programas musicales pero ahora todo lo que gira hacia la música son programas de talent show. ¿Qué hace que el público se interese únicamente por ese formato?
A: Creo que se ha perdido la cultura de programas como Música Sí. Da pena pensar que hubiera antes programas de ese tipo con grupos españoles tocando, entrevistándoles… eso era genial e incluso había bastantes canales de música. En España se lleva mucho el importarnos la vida personal de este o aquél, del morbo, de las peleas, si este está mal o no…
J: La gente muchas veces ve los programas porque participa gente famosa, o por escuchar tales versiones…
Robe Iniesta de Extremoduro dice que se pierde la esencia al grabar en directo con el móvil, ¿estáis de acuerdo?
A: Sí, pero a día de hoy se vive de Instagram, no me gusta que pase pero me interesa que pase. Si te graban luego te beneficia porque se hace eco más gente, pero es triste que el público disfrute viendo el directo con los móviles en mano, sería más bonito que de verdad vieran y disfrutaran tus canciones con todos los sentidos puestos en ello.
Escuchando vuestra música lleva a pensar en Pereza, ¿habéis mamado mucho de ahí?
A: Hemos mamado de mucha gente española, Pereza, Los Ronaldos… las comparaciones son buenas y malas. Está bien que nos comparen pero la vida y la música sigue. Hay que dejar de comparar tanto y no por eso tirarle abajo. Hay que apoyar a esas bandas que siguen estilos, en España somos mucho de tirar por el suelo al artista, a ciertas bandas. Lo que hizo Pereza ya lo hicieron Los Rodríguez y lo que hicieron estos ya lo hicieron otros… está bien que te comparen pero que miren más allá y te vean en directo también, cada grupo al final tiene su personalidad.
“La llamada” siendo un tema de un artista que viene del rock está nominada a mejor canción para Los Goya.
A: Sí, y eso es bueno para la música, para el rock. Prefiero mil veces que le pase a Leiva a que le ocurra a Maluma, por ejemplo. Hay gente y músicos menos conocidos que hacen cosas buenísimas, y que no se escuchan porque no les ponen en radiofórmulas. Hay mucho más que el puñetero regaetton, con la misma melodía e instrumental hora tras hora. Hay que tener iniciativa y buscar cosas por ti mismo en lo musical, no dejarte llevar solo por lo que ponen en las radiofórmulas de turno. Es triste que haya que poner RockFM como la única emisora donde poder escuchar a Loquillo, Fito o M-Clan, porque las radios comerciales no quieren esa música.
¿Qué lleva a que artistas tachados de machistas como puede ser Maluma por ciertas letras, tengan tantas chicas entre su público?
J: No sé si ellos mismos harán las letras y sinceramente, me lleva a pensar que todo está en un punto tan loco, en un tan sin sentido que se hace difícil de explicar.
A: Muchas veces a la gente no sabes lo que le va a gustar. Puede que hagas algo normal y que ofenda y que después una canción machista consiga vender tickets. Creo que son cosas de modas que la gente va donde está este famoso o el influencer de turno… así de triste. Esto es España y si el programa más visto de la televisión es Sálvame está todo dicho.
J: Esa industria se ha creado por temas como las redes sociales. Hace 15 años no lo podríamos ni pensar.
Vosotros dos, que salís con dos chicas famosas como Andrea Molina y Ana Fernández, ¿os ha condicionado de algún modo?
J: Siempre hay algún gilipollas de turno que dice cosas, pero es algo que siempre pasa. Gente sin mucha visión la hay en todos lados, y el que que habla sin saber me importa poco.
A: Pues mucho de eso viene a través de las redes, la gente opina de forma gratuita y criticar mola y muchos se apunta a un bombardeo en esos casos. Si subes algo ya están esperando para meter mierda.
Yo creo que el que te sigue de verdad, y el que paga un ticket lo hace porque le gustas y no porque estés con Andrea o Ana. Porque gustan tus canciones, porque te escuchan en el coche o lo pasan verdaderamente bien viéndote en el escenario, se trata de eso.
J: A veces nos escriben cosas que nos dejan flipados y nos reímos hasta que dices “qué cojones” si no nos conocen de nada.
Para muchos no sois rock y estáis en el punto de mira.
A: Desde luego, la gente se quedó encasillada en que el rock es romper guitarras sobre el escenario y gritar muy fuerte. Creo que el rock se lleva dentro, es sudar , currar y ensayar. Es la gente que no tiene ni puta idea que igual no ha visto un concierto de rock en su puta vida y quizás esos que dicen están viendo a Maluma en directo. Hablar es gratis y decir barbaridades también.
¿Habéis sentido el apoyo hacia el grupo por parte de Ana y Andrea y de vuestra familia?
J: Totalmente, son un pilar muy importante.
A: Sin duda, ellas y la familia nos han apoyado desde el principio. Y sabiendo diferenciar las cosas porque tampoco mola que estén muy metidas y expuestas a ello pero se agradece. Al final son nuestras novias como pueden ser la de otro. Es el concierto de tu novio, es algo normal que te vayan a ver.
J: Nosotros tenemos los cimientos muy bien puestos viniendo de un pueblo pequeño y llevamos nuestras relaciones y el grupo con total naturalidad, como puede ser cualquier otra persona sea conocida o no.
Qué estéis más expuestos al estar con personas conocidas, ¿os limita a la hora de postear en vuestros perfiles?
A: Yo pienso que publicamos lo que queremos, pero obviamente tienes cierto cuidado porque estás muy de cara al público. Quizás hace unos años me hubiera cagado literalmente y con todas las letras en el regaetton en mi Instagram pero ahora cuido más las cosas, sabiendo qué puede perjudicar a uno más o menos.
¿Creéis que tenéis un público definido?
J: En contra de lo que pueda pensarse tenemos una gran variedad, desde chicas de 18 años a mujeres de 45 años e incluso gente más mayor.
A: Lo más normal entre 17 y 30 pero también hay madur@s.
Hicisteis una campaña en Baqueira con Mastersgin, ¿cómo fue la aventura?
J: Brutal, fue la primera acción que hacíamos con una marca. Grabamos también en Salinas tres días un spot y fue genial. Ha habido muy buen rollo con ellos.
A: Fue un directo en la nieve, una experiencia al aire libre que sumar, tres días en la montaña con amigos y comiendo de puta madre.
Hablando de esto, que las marcas apoyen la música siempre es bueno.
A: Total, es cultura. Los eventos viven también de esto, sin marcas habría muchas cosas que no se podrían hacer. Que sigan apoyando la música, a medios y no a bloggeros e influencers… que al final no son nadie, porque no son ni periodistas ni profesionales de la comunicación.
J: Lo de influencer es muy relativo. Para mí una persona influyente es un crack en lo suyo, alguien que ha marcado en algo, ahora el influencer es salir bien en la foto y con la chica o chico de moda al lado y colgar la foto.
Para terminar, la experiencia Arenal Sound, ¿cómo fue?
A: La leche, increíble, lo pasamos genial y tuvimos muchísima gente viéndonos, con banderas asturianas incluso entre el público.
J: En la prueba la gente ya estaba de fiesta como si fueran las 5 de la mañana y pensé que no iba a haber ni dios, pero fue salir y la entrega total, con muchísimo público, fue un subidón y una grata experiencia.
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