TRABAJO DURO
Tan solo han necesitado tres discos para hacerse un hueco en la escena rock nacional, pero en realidad, SINAIA comenzó enganchando con su primera obra, melódica a más no poder, para con un segundo álbum tirar por una senda más contundente y, ahora, con «Solo humanos» conjuntar los destellos de sus discos predecesores encontrando el equilibrio adecuado. Con ellos hablamos.
En este tiempo desde el lanzamiento de «Solo Humanos», ¿qué reacciones y feedback habéis recibido?
La respuesta está siendo muy buena, más teniendo en cuenta que somos una banda de un alcance muy limitado. Los medios os vais haciendo eco y vamos recibiendo buenas palabras por vuestra parte, algo que siempre se agradece. Las ventas van de puta madre, ya se ha vendido la mitad de la primera edición y la primera tanda de merchan, así que no nos podemos quejar.
Para mí, el primer disco fue el más melódico, el segundo más enérgico y este tercero engloba y recopila ambas cosas para además ofrecer nuevos destellos como «Inercia», ¿qué opináis? ¿Era lo que buscabais?
Totalmente. Lo que buscamos con este disco es reafirmarnos en nuestra propuesta: nos gustan los riffs enérgicos y la melodía, esos son nuestros dos pilares. Y, a partir de esa premisa, vamos dando nuevos pasos e investigando lo que podemos hacer y lo que nos pide el cuerpo. Algunas veces será más hardcore, otras más alternativo, otras más punk… realmente nos consideramos punk, tanto en parte de nuestro sonido como en la manera de enfocar todo nuestro trabajo. Nos gusta todo ese batiburrillo, estamos muy cómodos ahi.
En la escena nacional, donde el indie copa tanto protagonismo, el rock y el hardcore ¿siguen teniendo su cabida?
Claro: toda la Península está trufada de eventos rockeros. El indie no es independiente, es mainstream y copan los medios generalistas… y, aún así los Viña Rock, Resurrection y demás se llenan. Hay muchos pueblos que juntan un par de buenas bandas y se hacen su festival de un día al que suele acudir muchísima gente: por ejemplo, nosotros este año disfrutamos del VDB Rock, un festival gratuito y solidario en el que actuamos nosotros y otras cuantas bandas junto a SA. Seríamos unas 3.000 – 4.000 personas, tranquilamente. Hay muchos eventos de ese tipo, pequeños festivales de un día en los que se crea un circuito durante todo el año que permite tanto a bandas como a público descubrirse mutuamente.
Donde más problemas puede haber es a nivel de salas, es jodido acceder a ellas, hay muy pocas que tengan unas condiciones justas para ambas partes, sobre todo cuando el grupo está comenzando. Pero vamos, que no creemos que el indie coma la tostada a nadie, y menos al rock. Llevan matando al rock desde finales de los 60, y siempre consigue reinventarse.
Para una banda que se lo guisa y come tanto por su cuenta, ¿es difícil sobresalir?
Dificilísimo, pero es como lo sabemos hacer. De todas maneras más que sobresalir lo que buscamos es labrar nuestra obra a través de un recorrido, no somos un grupo de un pelotazo y tira, a machacarlo. O no nos ha ido así, vaya. Nosotros vamos cubriendo nuestras necesidades, no nos volvemos locos con la parte comercial, irá creciendo si seguimos trabajando. la parte que nos importa principalmente, que es la artística, está siendo genial, así que si seguimos currando a pico y pala, todo vendrá, si es que lo merecemos.
Cuando comenzasteis hace ya unos cuantos años, ¿os pusisteis algún tipo de meta?
Sí, está claro que nos encantaría vivir de esto, pero aún tenemos que dar unos cuantos pasos más para llegar a ello, hay que ganárselo. En cuanto a cómo nos valora nuestro público, no podemos estar más contentos. Son la hostia. Se aprenden todo, se compran todo y lo disfrutan todo con nosotros como uno más. Eso es el copón.
Para quien aún no os haya visto en vivo, ¿qué es lo que va a encontrar al teneros enfrente?
Un grupo muy directo y contundente, con mucho músculo y muy viscerales. Nos vaciamos, literalmente. En directo somos un pelín más cafres que en disco, suena todo con esteroides, bien gordo. Y nos lo pasamos teta.
Madrid pasa a ser de la derecha, que medidas como Madrid central se quieran tumbar, que se ponga en duda el término “violencia machista”, ¿hace que retrocedamos a pasos agigantados?
No hay que ser analista ni estudiar cinco años en Salamanca para ver lo que viene por el lado derecho de la política, que es terrible: los fascistas llamando fascistas a los antifascistas y la población media comprando ese discurso. Y la izquierda cuqui, que no hace más que debilitar la lucha obrera y difuminar la lucha de clases con reivindicaciones de niño bien. Internacionalistas comprando el discurso de nacionalistas. Tenemos un buen fregado en la Península, sí.
Y en cuanto a la música, este tipo de gobiernos ponen más trabas a la música y en concreto, al rock que siempre es combativo.
Clarísimamente, además que lo anuncian con chulería y prepotencia. Mira Def con Dos. Una cosa es que no te contraten porque no les va tu historia, y otra que te tumben un contrato firmado previamente, eso seguramente sea prevaricar. Son unos carapollas amargados, pero si tienen el poder, nos joden vivos. Es así.
Habéis puesto mucho cariño a la producción como vimos en persona, es importante a día de hoy, cuando todo es streaming y mucha gente escucha a veces la música en móviles o PC.
Claro que es importante, muy importante. Y seguiremos por ahí e intentando mejorar para que sean ediciones que merezcan la pena. Hay un porcentaje de gente que quiere tener un producto trabajado con mimo y sentirse parte de ello, así que para esa gente es la edición física. Sabemos que la mayor parte de la gente no quiere edición CD, pero es que no es para la mayoría de la gente, es para un grupo muy selecto de gente que disfruta de toda la obra como nosotros.
Habéis contado con Juan de SA ¿teníais claro que tenía que formar parte de “Cultura desalmada”?
Juan es uno de nuestros tótems. Inspiración máxima, tenemos un respeto a la figura de SA que llega casi a la devoción. Son un ejemplo de personalidad, constancia, trabajo duro, talento… tener a Juan en un pepinazo como «Cultura Desalmada» es un regalazo. Además, que surgió de manera muy natural, sin forzar nada, así que de la leche. Son la puta hostia.
Escuchando vuestros tres discos, ¿estáis contentos de los pasos dados en lo musical?
Sí, claro. Es lo que nos sale de dentro, es lo más puro de todo esto. Es el quid de esta cuestión. Nos divertimos muchísimo acercándonos a las canciones de nuestra manera.
¿Una banda internacional que sea referencia para todos vosotros?
Uf. Varias. Desde los mega espectáculos de estadio de Muse a los conciertos en sala pequeña de The Menzingers. Berri Txarrak nos parecen un gran ejemplo (y los meteríamos en internacionales por muchas cosas, como sus productores y sus giras), Rise Against, Comeback Kid, Refused… no sé, muchas.
¿Un film que os guste mucho?
El bueno, el feo y el malo.
¿Una serie que recomendar?
El cuento de la criada.
Dedicarse al 100% a esto, ¿es un objetivo razonable?
Si no te flipas con lo que te dicen tus familiares y amigos de que “lo vais a petar”, sí. Ese es un error que solemos tener todos al principio. Es muy jodido y mucho más duro de lo que la mayoría de gente piensa, pero sí, es factible.
En qué toca trabajar para poder compaginar conciertos, grabaciones y toda la historia que conlleva una banda para no tener problemas de despidos.
Un par de nosotros somos autónomos y los otros hacen malabares y se pelean con sus jefes pero ¡así es de momento! Si no dedicas todo tu tiempo a ello, pues hay conflicto, es normal.
¿Algo con lo que terminar?
Almeida Carapolla.