UNA PISTOLA EN CADA MANO
Cameo
Sería complicado decir que UNA PISTOLA EN CADA MANO pertenece a un género u otro, porque al igual que su amplio abanico de actores y las historias aquí contadas contamos con episodios de diversa índole si bien su esqueleto fílmico lo encontramos en hombres que superan los 40, esa complicada franja y cuya desconcertante vida es claro ejemplo de lo convulso de esa edad.
Cesc Gay se pone a los manos de una comedia cuyo plato fuerte es el gran reparto de actores, argentinos y españoles como Javier Cámara, Leonardo Sbaraglia, Eduardo Noriega o Ricardo Darín, quienes siempre dan fiabilidad al producto.
Un film centrado en los diálogos y las discusiones, muchas podemos decir, donde radica el verdadero peso de la cinta. Pura conversación, como les gusta a los argentinos, y cuyo gran aliciente es lo ameno de lo que se cuenta, de forma agradable, por momentos divertida y en la que los humanos y sus problemas son el gran protagonista.
Cómo no, crisis económica, depresión, problemas conyugales, divorcios, infidelidad y otros problemas salen a la palestra dejando más bien en mal lugar al de 40 y en buena posición a la mujer.
Una disputa verbal creada en torno a divertidos personajes y realismo actual son sus notas dominantes, si bien como film en su contenido al completo no llega a colmar igual las grandes expectativas con las que uno afronta la cinta.